sábado, 3 de septiembre de 2011

Capitulo 23:El cuadro

Los días transcurrieron rápidos, todo el mundo me intentaba calmar por lo ocurrido, pero se notaba que no estaban tranquilos. Yo disimulaba pero, en el fondo, quería saber más, como qué era esa sombra, porqué me paralicé...

Decidí ir a la biblioteca a investigar sobre todo esto, pero todo lo que encontré sobre vampiros eran pura leyenda y sobretodo nada sobre los anti vampiros. Entonces, pensé que a lo mejor, y solo a lo mejor, Adam tendría información en su biblioteca. Y pues, sin que nadie me viese, penetré en la estancia tan sigilosamente como pude. Rebusqué en dos archivadores, hasta que encontré un apartado que ponía anti vampiros, y allí encontré una serie de archivos todos ordenados cronológica y alfabéticamente. Me senté en el escritorio, sintiéndome un poco tonta e impertinente por sentarme en un sitio en el que no había sido invitada a sentarme y aún encima estaba allí sin que nadie me viese, vamos, que me estaba arriesgando demasiado. Pero, valía la pena; al sentarme, en el escritorio vi una foto de una mujer preciosa, con el pelo largo y negro, sus ojos eran del color de la miel y tenía una gran y destacada boca de color carmín. Sus ojos eran hipnotizantes, y no pude parar de pensar en aquella chica, pero tenía que seguir con mi investigación y empecé a leer:

Los antivampiros son los únicos enemigos naturales de los vampiros, lo único que los diferencia: ellos matan por diversión.

Matan a sus presas. Tanto humanas como vampiras.

Tienen poderes parecidos a los de los vampiros, solo que ellos no tienen poderes especiales.


Era como una espécie de lista, como los apuntes de un estudiante. La lista era larguísima, Luz se iba a retomar la lectura hasta que oyó una voz:

- ¿Qué se supone que haces?

1 comentario:

Iria Cruz dijo...

Espero que el próximo capítulo sea pronto, me será dura la espera eh!

jaja un besoo


Atte: Iriaa

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