viernes, 2 de septiembre de 2011

CAPÍTULO 8: La mañana

Esa mañana desperté de muy buen humor. No me acuerdo a qué hora me acosté pero podía saber a cual me desperté… ¿Las 12?... No podía ser…
Cuando me desperté William y su padre estaban durmiendo, bueno, era sábado no pasaba nada. Puede que a los vampiros les guste dormir de día lo máximo que puedan…
Me fui a duchar, ya que, había un cuarto de baño en la habitación. Después de salir oí ruidos, de repente apareció William
- Buenos… - dijo callándose ya que vio que estaba en ropa interior, se giró y terminó la frase aunque ruborizado- días, sito haber entrado sin llamar no tengo la costumbre de tener gente en casa a parte de mi padre, claro…
- No pasa nada, buenos días a ti también… - dije yo también ruborizada.
- Mi padre me ha dicho que el desayuno está listo que bajes cuando quieras – dijo y se fue cerrando la puerta para que yo tuviese intimidad.
Me vestí a la velocidad de un rayo, me peiné y todo eso. Bajé abajo, para mi sorpresa había tortitas americanas y huevos fritos y… un desayuno típico inglés. Estaba delicioso.
Después del desayuno, recogí mis cosas de la habitación, pero vino Adam y me dijo:
- ¿Cuándo vienen tus padres?
- El fin de semana que viene
- Eso es mucho tiempo sola…
- Sí, bueno… ya estoy acostumbrada.
- Te propongo una cosa, quédate aquí en casa hasta que lleguen tus padres. Así no te tendrás que hacer de comer y todo eso. – dijo Adam con una sonrisa a la que no podías decir que no, pero…
- Papá, ¿y que ganas tu con eso? Porque es más trabajo para ti.
- Es que es como una hija así habrá alguien más en casa, podréis ayudaros entre vosotros en los deberes y así no estarás tan solo…
- Bueno, pues vale, me servirá en los estudios muchísimos y también para saber cómo viven otras familias…-dije entusiasmada por poder saber más cosas sobre los vampiros.
- Perfecto, id a buscar tus cosas y te instalas aquí, ¿vale?
- Bien, vamos William.
Salimos de casa de William hacia la mía, no era un trayecto muy largo pero… Volví a oír su pensamiento y esta vez él quería que lo hiciese:
<< Eres tonta, estas arriesgando tu vida, serás estúpida. ¿Por qué arriesgas tu vida?>>

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